La crisis de los refugiados: dos nuevos voluntarios en Grecia

Empieza la aventura. Al fondo del bus, un Sócrates del siglo XXI. Sí, estamos en Grecia, Tesalónica, y sobrevivimos al vehículo por poco. Parecía que se iba a caer a pedazos mientras el conductor, hablando por el móvil, se marcaba un rally nocturno en toda regla. Al margen de 'la ley'. Como la mayoría de los pasajeros, que no pagaban billete. El chófer estaba demasiado ocupado en su solitaria carrera como para vigilarlo. Lo entiendo, para qué meterse en líos. El auto se apagó en dos ocasiones y me hizo pensar que los autobuses en España tampoco están tan mal. Primeras sensaciones sobre el pueblo griego: cansancio y caras muy reflexivas. También era normal teniendo en cuenta que eran las 4 de la mañana.

Por cierto, volamos con Vueling. Todo bien salvo una pelea por el calor asfixiante y la ausencia temporal de aire acondicionado. El vuelo debió salir con media hora de retraso.

Hoy toca turisteo y conocer a los que serán nuestros compañeros de piso por al menos una semana. Mañana empieza lo bueno. Nos dirigimos al campo de refugiados Elpida Factory. Uno de los pocos, si no el único, independiente de las fuerzas militares griegas. Lo organiza la ong Together for Better Days. Iremos informando!

FECHA: 7 de julio de 2016