La temporada 2011/12 no está siendo, por el momento, la mejor del Barça Regal de estos últimos años. Tampoco se puede decir que sea una mala temporada, ni muchísimo menos... Pues los objetivos se van cumpliendo. Pero es evidente que el equipo no está del todo fino este año. Problemas de lesiones, nivel intermitente de algunos jugadores clave y fichajes que no acaban de dar el paso adelante que se esperaba de ellos...
Lo cierto es que el equipo sigue dependiendo de los jugadores que llevan marcando la diferencia en los últimos tiempos: Juan Carlos Navarro (indiscutible líder en el campo) y Erazem Lorbek. Sin embargo, ambos han bajado un poco su rendimiento con respecto a la temporada pasada. Navarro debido a la fascitis que le ha tenido apartado de las canchas algunos meses. Lorbek, quizás, por la presión de tener que asumir los galones demasiado a menudo y, sobre todo, cuando ha faltado 'Juanqui'.
Lo mejor de esta temporada está siendo, sin duda, el salto de calidad que ha dado el pívot senegalés Boniface Ndong. Se ha hecho el cinco indiscutible de este equipo tanto en defensa como en ataque. Pero ahora está lesionado. Mientras que el otro pívot fuerte, Fran Vázquez, ha dado un paso atrás. Aunque sigue sumando, no lo hace con el potencial de las dos últimas temporadas.
Seguramente se notan las importantes bajas que ha tenido la plantilla. Jugadores que aportaban en el campo, pero sobre todo aportaban a nivel colectivo al grupo, por su carácter y su fuerte compromiso. Hablo de Gianluca Basile y de Roger Grimau. Además hay que sumar la baja de Ricky Rubio (que, en mi opinión es la que se ha sabido suplir con más solvencia este año, gracias al buen trabajo de Marcelinho Huertas) y de dos aleros fuertes como son Morris y Anderson (de personalidad peculiar este segundo, un poco alocado, pero que aportaba mucha anotación).
En su lugar han venido un poderoso alero norteamericano, Chuck Eidson, que está haciendo un buen papel, pero que no logra marcar las diferencias, y el exjugador del Gran Canaria, también americano, CJ Wallace. Este está mejorando en los últimos partidos, pero no es ni mucho menos un jugador que asuma galones. Por su parte, la repesca del canterano Xavi Rabaseda parece que ha sido precipitada, ya que a penas está contando con minutos, el catalán de 22 años.
En cuanto a las incorporaciones de anteriores campañas, tampoco consiguen adaptarse del todo a lo esperado por el técnico, Xavi Pascual. El australiano Joe Ingles parece que cada vez aporta más, pero le sucede como a Wallace. No se le ve coger el protagonismo. Por lo que respecta a Kosta Perovic, podríamos decir que es el gran fiasco de la plantilla, ya que a pesar de su corpulencia y teórico poderío físico, suma con cuentagotas.
No nos olvidamos de otros dos jugadores clave en la formación catalana estos últimos años. Pete Mickeal, el otro alero importante del equipo, no acaba de encontrar una regularidad que fascinó al barcelonismo hace dos temporadas, debido a la importante lesión que sufrió el año pasado. De otro lado, Víctor Sada. El típico jugador que siempre cumple. Constante, trabajador y regular, es una pieza imprescindible de este Barça. Pero sabemos que no es un 'Killer'.
Pese a todo, el conjunto es líder de la Liga Endesa y se ha clasificado con solvencia para la Final Four de Estambul (derrotando, no sin sufrir, al Unics Kazan por 3-0). Y, sin duda, es un equipo que aspira a ganarla. Pero si hace un año era el claro favorito (aunque se quedase a las puertas de la ansiada final a cuatro en Barcelona), este año no podemos decir lo mismo. Olympiacos y, sobre todo CSKA, son temibles rivales. Sí que era favorito, en cambio, para ganar la Copa del Rey, pero se topó con un Madrid más joven que, por primera vez en mucho tiempo, dejó sin opciones al Barça.
Dos veteranos sobresalientes cara a cara: Juan Carlos Navarro y Rafa Martínez |
Lo bueno es que, pese a todo, el equipo sigue sacando los partidos adelante. Son jugadores muy comprometidos, con veteranía, acostumbrados a jugar grandes citas, y que atesoran muchísima calidad. La presente campaña se acerca a su fin, y el equipo llega con las aspiraciones intactas y posibilidades en todos los frentes. Pero no por ello debemos pasar por alto que este año el salto de calidad ha sido en falso. De cara al año que viene, hay que tomar medidas.
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