sábado, 12 de noviembre de 2011

España, incapaz de marcar, cae en Wembley

España mandó de principio a fin y en los compases finales puso contra las cuerdas a Inglaterra, pero la falta de acierto cara al gol propició la derrota del combinado de Del Bosque


El mítico estadio de Wembley, que tan buenos recuerdos trae al FC Barcelona (Champions del '92 y del 2011), fue el escenario escogido para presenciar un duelo de auténticos titanes: la Inglaterra del siempre meticuloso Fabio Capello contra la España del 'tiki taka', la más culé de la historia, comandada por Vicente Del Bosque.

Los dos ex técnicos madridistas pusieron sobre el tapete las fichas, a priori, idóneas para gozar de un partido de altos vuelos. En el mejor lugar posible, el país que dio origen al fútbol debía demostrar que puede competir con el cojunto que ha llevado, junto al FC Barcelona, este deporte a su máxima expresión. Y vaya si lo hicieron los ingleses, que sin saber muy bien como, salieron de su estadio con una victoria bajo el brazo. Eso sí, por la mínima y sin convencer a nadie.

Casillas igualó a Zubizarreta con 126 internacionalidades
Alineaciones y curiosidades

Vicente Del Bosque ideó un once de posesión total, compuesto por: Casillas; Arbeloa, Ramos, Piqué, Jordi Alba; Busquets, Xavi, Xabi Alonso, Iniesta, Silva; Villa.

El combinado inglés, por su parte, salió al césped de Wembley representado por: Hart; Johnson, Jagielka, Lescott, Cole; Walcott, Jones, Parker, Lampard, Milner; Bent.

En la cita que se disputó en Londres, Iker Casillas igualó el récord de Andoni Zubizarreta con 126 internacionalidades.

Antes del partido, se hizo un minuto de silencio por las víctimas inglesas de la Primera Guerra Mundial. Silencio sepulcral en Wembley.

El nuevo estadio de Wembley, en Londres
Amistoso con aires de grandeza

El partido comenzó con sabor a gran cita. Ambos equipos salieron muy entonados, jugando con velocidad, tensión, intensidad. España tocando más, como siempre, pero ante una Inglaterra muy bien posicionada, con la directriz clara de su seleccionador: no dejar espacios para las internadas de 'la Roja' por el centro.

Como novedad, Del Bosque planteó un once plagado de centrocampistas en que Villa se pegó a la banda izquierda, con Iniesta por la derecha y Silva actuando de falso delantero. En el centro de la zaga, el seleccionador apostó por la que dicen será la pareja de centrales del futuro: Piqué-Ramos, con el joven talento del Valencia, Jordi Alba, en el lateral izquierdo.

A pesar de la intensidad, hubo pocas jugadas destacables durante la primera mitad. Tanto fue así que con el primer córner del partido, a favor de Inglaterra en el minuto 10, Wembley rugió.

A medida que pasaban los minutos, España fue ganando en dominio y profundiad, pero faltaba concretar en los metros finales.


Busquets y Xavi tratando de robar el balón a Ashley Cole

Una 'Roja' con estilo azulgrana

En una jugada de toque al más puro estilo Barça, una internada de Jordi Alba por la banda izquierda, a pase de Villa, dejó un balón en bandeja para el remate desde la frontal, pero Silva no llegó a impactar el esférico.

En el minuto 38, el árbitro Frank De Bleeckere (señalado por Mourinho en las pasadas semi finales de la Champions) señaló un dudoso fuera de juego cuando se quedaban solos ante el portero tanto Villa como Silva. El canario remató igualmente, aunque el disparo fue detenido por Hart. Pocos minutos después, Milner propinó una dura entrada a Sergio Ramos, viendo la primera amarilla del partido. Los minutos pasaban y la tensión se hacía notar. En piel de los ingleses porque a penas olían la pelota. En los españoles porque no había forma de rematar.

Se llegó al descanso con tan solo un chut a puerta por parte de cada equipo, y con la sensación de que faltaba aumentar el nivel de peligrosidad por parte de las respectivos ataques. No obstante, si hubo algún equipo que propuso fútbol, ese fue el combinado nacional.

Lampard marcó para Inglaterra
Precoz gol inglés nada más reanudarse el encuentro

Tras el descanso, Vicente Del Bosque propuso varios cambios en su alineación. Dio entrada a Mata, Cesc y Reina. Salieron del campo Silva, Xavi y Casillas.

Villa trató de amedrentar a los ingleses con un disparo lejano que se fue arriba. Un minuto después Inglaterra se avanzaba en el marcador con un gol de Lampard de cabeza, tras rechace de un lanzamiento que se estrelló en el poste derecho.

Con el primer gol en el casillero en contra, a la selección no le quedaba otra que ponerse las pilas, y otra vez Villa estuvo a punto de marcar tras un pase magistral con la zurda de Busquets que habilitó al asturiano. Pero el chut se fue al lateral de la red.

Llegó la fase de estancamiento del choque, cuando los españoles vieron dos amarillas (a Sergio Ramos y Cesc Fàbregas) casi consecutivas y ambos seleccionadores se pusieron de acuerdo para mover de nuevo los banquillos (doble cambio en el combinado inglés, entrando Barry y Rodwell, y siendo sustituido el único goleador de la tarde, Frank Lampard; luego entró Bent por Walcott, y Del Bosque dio entrada a Torres por Busquets, yendo a por el partido).

Fue sin duda la fase más cómoda para Inglaterra, que estuvo muy cerca de hacer el segundo ante un Pepe Reina que ya no transmite la seguridad de antaño.


Andrés Iniesta estuvo controlado en todo momento
España se crece en los compases finales sin éxito

David Villa siguió pelenado contra su mala suerte de cara a portería, y se sacó de la manga un duro zapatazo que impactó con fiereza en el palo.

Llegaron el quinto y sexto cambio para 'La Roja'. El capitán azulgrana, Carles Puyol, y Santi Cazorla daban descanso a Sergio Ramos y a Andrés Iniesta. Para Inglaterra se fue Milner y entró Adam Johnson.

Cerca del minuto 80, el control de España sobre los de Capello se tornó casi absoluto. Un gran centro de Xabi Alonso fue controlado por Mata dentro del area, éste se la procuró poner a Torres para el remate, en una combinación muy 'blue', pero finalmente el peligro fue abortado en un nuevo córner.

España continuaba llegando, con una participación muy activa de Cesc, Mata y Villa. El primero fue objeto de una posible falta dentro del area que De Bleeckere no consideró constitutiva de suponer una pena máxima. Pensando en terminar el partido cuanto antes, Capello cambió a Parker, ovacionado, dando unos minutejos a Kyle Walker.

Cesc Fàbregas se erigió entonces como el máximo candidato a conseguir la igualada y mediante un fuerte lanzamiento desde la frontal del area, trató de sorprender a un sólido Hart, sin éxito. Segundos después el propio Fàbregas erró un gol cantado tras jugada y pase del asturiano, Villa.

David Villa lo intentó en innumerables ocasiones
Los jugadores del Barça, los más activos

Finalmente, no sirvió de nada la insistencia de la selección, encarnada, sobre todo, en ocasiones que salieron de las botas de los jugadores del Barça, David Villa y Cesc Fàbregas.

Inglaterra venció con tan solo cinco llegadas a la portería que defendió Casillas en la primera mitad y Reina en la segunda.

España mereció más por juego y ocasiones, ya que después del gol inglés, el conjunto de Capello se limitó a defender, sin proponer practicamente ninguna otra acción ofensiva. A pesar de ello, la estrategia salió bien y los ingleses, creadores del fútbol, ya pueden decir que han derrotado a la campeona del mundo.


Cesc Fàbregas gozó de las oportunidades más claras al final

 

Ficha técnica:

1 - Inglaterra: Hart, Glen Johnson, Jagielka, Jones (Rodwell, m.57), Cole, Parker Walker, m.85), Lescott, Milner (Adam Johnson, m.76), Walcott, Lampard (Barry, m.57) y Bent (Welbeck, m.64).
0 - España: Casillas (Reina, m.46), Arbeloa, Sergio Ramos (Puyol, m.74), Piqué, Jordi Alba, Busquets (Fernando Torres, m.64), Xabi Alonso, Xavi (Cesc, m.46), Iniesta (Cazorla, m.74), Silva (Mata, m.46) y Villa.
Goles: 1-0, m.49: Lampard.
Árbitro: Frank De Bleeckere (BEL). Amonestó a Sergio Ramos (59) y Cesc (61) por España, y a Milner (41) por Inglaterra.
Incidencias: Encuentro amistoso disputado en Wembley, ante 87.189 espectadores. Inglaterra y España lucieron brazaletes negros y guardaron un minuto de silencio por el "Día del Recuerdo", en honor de todos los soldados británicos fallecidos desde la Primera Guerra Mundial.

 

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